Atomic Blue Dream Feminizada

Atomic Blue Dream Feminizada

En esta ocasión, la protagonista es una Atomic Blue Dream Feminizada. Este híbrido 50/50 posee un patrón de crecimiento claramente sativa, con una amplia distancia internodal y una cola principal que ocupa su mitad superior. Si se deja a su aire puede alcanzar una gran altura, pero en nuestro caso pudimos controlarla y logramos un rendimiento impresionante.

Duración total del cultivo: 88 días

Etapa de floración: 60 días

Altura final: 112 cm

Rendimiento final: 132 gramos

Contenido en THC: 22,12%

Para cultivar nuestra Atomic Blue Dream Feminizada empleamos una lámpara HPS Philips GreenPower de 1000 W, la cual se programó inicialmente con un horario de 18/6 horas. La semilla se cultivó en una maceta de plástico de 8 litros rellena de BAC Lava Mix y cubierta con una fina capa de lana de roca. Durante la etapa vegetativa, mantuvimos el cuarto de cultivo con una temperatura estable de 23°C durante el día, la cual bajaba a 21°C por la noche, y una humedad relativa del 65%.

Germinación y plántula

Antes de nada, hay que germinar las semillas. Afortunadamente, esta tarea es una de las más sencillas de todo el proceso y no requiere ningún equipo especial. Lo único que te hará falta son unas toallitas de papel, un plato y una bolsa de plástico.

En primer lugar, dobla unas toallitas de papel y ponlas en un plato. A continuación, humedécelas con un poco de agua (unos 20-30 ml) pero sin empaparlas. Ahora, coloca las semillas de marihuana encima de las toallitas, separándolas unos centímetros. Cúbrelas con otra servilleta de papel húmeda y ponlo todo en una bolsa de plástico abierta. Déjalas reposar en un lugar cálido durante un día más o menos.

Transcurrido más o menos un día, la semilla comenzó a abrirse, mostrando su raíz pivotante. La plantamos con la raíz primaria hacia abajo en un cubo de lana de roca previamente empapado, el cual ubicamos bajo una lámpara de 600 W para que se desarrollaran las raíces durante unos días. Las plántulas son bastante frágiles en esta fase, por lo que un exceso de luz, calor o agua podría impedir que enraizaran. Al cabo de tres días le proporcionamos su primera alimentación, la cual consistió en 100 ml de agua con un pH equilibrado (pH 6,2; CE 0,8) mezclada con una pequeña cantidad de hormona de enraizamiento.

Etapa vegetativa

Al final de la primera semana, nuestra Atomic Blue Dream Feminizada alcanzaba ya los 12 cm de altura y presentaba un aspecto saludable. Todavía no le habían brotado las hojas verdaderas, pero los cotiledones exhibían una intensa tonalidad verde. Como las raíces sobresalían por la base del cubo de lana de roca, había llegado el momento de trasplantarla a su nuevo hogar: una maceta de plástico de 8 litros que colocamos bajo la lámpara de 1000 W. También modificamos la alimentación: la empezamos a regar con 200 ml de agua (pH 6,0; CE 1,4) mezclada con nutrientes líquidos Bio Grow.

En la segunda semana, la plántula creció con cierta lentitud, pues su altura solo aumentó 5 cm, situándose en los 17 cm. Aparecieron sus primeras hojas verdaderas, con una segunda serie en camino. Como la planta era alta y un poco pesada, añadimos un tutor de madera para evitar que se tumbara.

En la tercera semana se produjo un crecimiento significativo: la planta se elevó otros 9 cm, por lo que ya alcanzaba los 26 cm de estatura. También desarrolló nuevos grupos de hojas, los cuales presentaban un espaciado internodal bastante estirado, y ya veíamos los primeros signos de ramas laterales. Como el crecimiento iba viento en popa, y como la etapa de floración estaba a la vuelta de la esquina, duplicamos el volumen de agua aportado, fijándolo en 400 ml al día.

Antes de pasar a la etapa de floración, colgamos unas bolsitas de Neoseiulus californicus y Amblyseius swirskii de las ramas inferiores de la planta. Estos saquitos contienen cientos de bichos diminutos que viven en simbiosis con las plantas de cannabis y no les causan ningún daño. Al contrario, estos organismos beneficiosos se alimentan de parásitos como las arañas rojas y los trips, los cuales pueden destruir una cosecha si no se les hace frente rápidamente. Estas bolsitas se sustituyen cada cuatro semanas para mantener una población estable.

Etapa de floración

Iniciamos la floración de nuestra Atomic Blue Dream en la cuarta semana. Para ello, modificamos el horario de iluminación, fijándolo en 12/12. También cambiamos la alimentación diaria, aumentando la dosis a 800 ml de agua con pH equilibrado (pH 6,0; CE 1,8) mezclada con nutrientes líquidos Bio Flower.

Nuestra planta de marihuana alcanzó en esa semana una altura de 39 cm, y este crecimiento vertical estuvo acompañado de un crecimiento bastante robusto de las ramas laterales. Presentaba una distancia internodal amplia, así como unas hojas anchas y pesadas. En vista de este nuevo crecimiento, redujimos la humedad del cuarto de cultivo al 60% para evitar la aparición de moho.

La quinta semana se caracterizó por un crecimiento vertiginoso de la planta, la cual se elevó 19 cm hasta alcanzar una altura de 58 cm. Casi todo el desarrollo se centró en el tallo principal, mientras que las ramas laterales seguían siendo bastante cortas. Sin embargo, el espacio internodal entre las ramas y el tallo principal se iba ampliando rápidamente, lo que le proporcionó un aspecto alargado y cilíndrico a la planta. Para asegurarnos de que nuestro ejemplar estuviera en condiciones de mantener el nuevo crecimiento, aumentamos el riego a 1000 ml al día.

Nuestra planta registró otro fuerte estirón en la sexta semana, llegando a medir 74 cm de altura. Durante esta semana se produjo asimismo el desarrollo definitivo de las ramas laterales, las cuales crecieron significativamente hacia el exterior, imprimiendo una silueta que parecía la de un árbol de Navidad larguirucho y alargado, lo que ponía de manifiesto externamente los genes híbridos 50/50 de la variedad. Surgieron los primeros signos de floración, pues aparecieron pequeños racimos de pelos blancos en la parte superior de las ramas. Como la floración plena estaba a punto de desatarse en cualquier momento, aumentamos el volumen de agua a 1500 ml cada día.

El crecimiento vertical se frenó ligeramente en la séptima semana. La planta alcanzó una estatura de 87 cm y el tallo principal se situaba muy por encima de las ramas inferiores. En ese momento, cada una de las zonas de floración estaba bien consolidada y las flores se desarrollaban rápidamente. Decidimos reducir la humedad ambiental, situándola en un 60%.

En la octava semana se produjo el último crecimiento significativo de la planta, la cual alcanzó los 100 cm de estatura. Para entonces, todas las zonas de floración presentaban un cogollo impresionante, y la cola principal se estaba convirtiendo en un bello espectáculo, mientras que las ramas inferiores sostenían admirablemente unas flores cada vez más grandes.

Nuestro ejemplar alcanzó los 107 cm de altura en la novena semana, con una cola principal plenamente formada, la cual ocupaba la mitad superior de la planta. Los pistilos adquirieron rápidamente un color naranja intenso, lo que significaba que la cosecha estaba a la vuelta de la esquina. Las ramas laterales más altas seguían creciendo verticalmente en su mayor parte. Sin embargo, el peso creciente de los cogollos tiraba ligeramente hacia abajo de las más bajas, pero no fue necesario proporcionar más apoyo.

Durante la décima y la undécima semana, la cola principal siguió elevándose, alcanzando los 110 cm de altura. En ese momento, la cola principal era un auténtico coloso, y los cogollos inferiores eran densos y rebosaban resina. La cosecha estaba a la vuelta de la esquina.

Por último, en la duodécima semana, cosechamos nuestra Atomic Blue Dream con una altura final de 112 cm.

Cosecha

Cosechar nuestra Atomic Blue Dream Feminizada fue pan comido. Para empezar, la cortamos por la base, manicuramos las hojas en abanico y la colgamos boca abajo en un espacio climatizado. Mantuvimos la habitación a una temperatura constante de 15,5°C con una humedad relativa del 50% y dejamos la planta colgada hasta que las ramas se volvieron lo bastante quebradizas como para romperse al doblarlas, algo que suele ocurrir entre los 10 y 20 días.

Cuando la planta estuvo lo suficientemente seca, retiramos los cogollos y manicuramos las hojas restantes. Como esta variedad presenta una distancia internodal más amplia y una vegetación relativamente ligera, la tarea resultó muy sencilla, aunque algunas de las hojas de azúcar eran bastante pequeñas y fue un poco difícil quitarlas todas. Una vez manicurados los cogollos, los pusimos todos en frascos de cristal para su curado.

Dejamos los recipientes abiertos durante las primeras 24 horas para que se evaporara la mayor parte de la humedad restante. Los cerramos, pero los íbamos «eructando» durante una hora varias veces al día. Fuimos reduciendo poco a poco la frecuencia hasta que solo lo hacíamos una vez al día. Tras unas 6 semanas de curado, nuestra Atomic Blue Dream estaba lista para su degustación.

En total, pudimos obtener una excelente cosecha compuesta por 132 gramos de flores secas con un contenido de THC del 22,12% igualmente respetable.

Perfil de terpenos

Al acercarse la cosecha, nuestra Atomic Blue Dream Feminizada comenzó a desprender un aroma dulce a arándanos, aportación de su genética Blue Dream. Estos sabores afrutados se mezclaron con las notas ácidas a lima y cítricos de la Chernobyl, combinándose todo a la perfección para formar un aroma singularmente atractivo y complejo.

Los cogollos, una vez curados, desprendían un potente aroma dulce a arándanos y cítricos, el cual dominaba a los matices terrosos y a pino, ligeramente más sutiles. Todos ellos también estaban presentes en el delicioso sabor que se podía paladear al inhalar, refrescante y suave, seguido de un final dulce y ácido, salpicado de un toque herbáceo especiado que añadía complejidad al dulce sabor afrutado.

En cuanto exhalamos la primera calada de la Atomic Blue Dream Feminizada, nos invadió un subidón mental estimulante y eufórico que potenció al instante nuestra creatividad, motivación y concentración. Poco a poco se fue transformando en una sensación relajante, perfecta para calmarnos sin dejarnos pegados al sofá. En general, esta variedad es una elección estupenda para esos momentos en los que tienes que ir a algún sitio y hacer cosas estando concentrado y relajado a la vez.

El resultado

Aunque la Atomic Blue Dream Feminizada es un híbrido perfecto 50/50, su patrón de crecimiento y sus efectos son claramente sativa. Si no se vigilan de cerca, estas plantas pueden convertirse en auténticos monstruos, y puede que no sean especialmente adecuadas para cultivadores de interior con poco espacio. Sin embargo, con una floración temprana y un poco de entrenamiento, estamos ante una variedad especialmente gratificante para el cultivador cuando llega la cosecha.

  • Disclaimer:
    Las leyes y regulaciones relativas al cultivo de cannabis difieren de un país a otro. Por lo tanto, Sensi Seeds recomienda encarecidamente que se revisen las leyes y regulaciones locales. No se debe actuar en contra de la ley.

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    Sensi Seeds

    El equipo editorial de Sensi Seeds incluye botánicos, expertos médicos y legales, además de activistas de renombre como el Dr. Lester Grinspoon, Micha Knodt, Robert Connell Clarke, Maurice Veldman, Sebastian Marincolo, James Burton y Seshata.
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