Los mejores consejos para prevenir las plagas en exterior

A ladybug eating plant villages on a plant

El jardinero de exterior se encuentra a merced de los elementos y de cualquier sorpresa desagradable que la Madre Naturaleza tenga el gusto de dejar caer sobre nosotros, como moho, enfermedades, y por supuesto, las plagas de insectos y animales. En este artículo, nos centramos en algunas formas de controlar las plagas al aire libre, de mínimo impacto y respetuosas con el medio ambiente, para que puedas evitar utilizar productos químicos fuertes.

Asegúrate de que el suelo esté esterilizado

En el suelo, se puede encontrar un gran número de agentes patógenos al acecho. Por lo general, si compras sustrato, o mezcla sin sustrato, de un proveedor de confianza, debe estar libre de parásitos, microbios e insectos minúsculos que se pueden encontrar en el suelo de exterior normalmente.

Sin embargo, si la tierra del suelo es de muy buena calidad, es posible que quieras utilizarla en lugar de gastar en comprar. En este caso, es posible que te plantees la solarización o la esterilización con vapor, métodos que destruyen a la mayoría de los residentes perjudiciales de los suelos, al tiempo que permiten que sobrevivan varias bacterias importantes para su planta de cannabis, resistentes al calor y beneficiosas.

Cultiva plantas de compañía

Una flor de geranio púrpura
Los geranios, que despiden un fuerte aroma, suelen utilizarse como plantas de compañía para repeler a los insectos (© Jacilluch)

Las plantas de compañía son un regalo magnífico para el jardinero de exterior. Los jardineros y agricultores de todo el mundo llevan siglos, si no milenios, utilizando las «hierbas útiles» autóctonas. Un ejemplo conocido es el método sudamericano que consiste en sembrar maíz, judías y calabaza.

En el caso del cannabis, entre las plantas de compañía conocidas que repelen insectos y pequeños animales se incluyen el geranio, la caléndula, el ajo y la cebolla. El ajo, en concreto, es muy valorado como compañero, ya que puede repeler a los áfidos, pulgones, araña roja, e incluso a los ratones y conejos. Intercala las plantas de compañía entre las plantas de cannabis, o si es posible, instala un «cerca» ¡alrededor de toda la cosecha!

Utiliza insectos beneficiosos

Los insectos beneficiosos son otro as en la manga del cultivador de exterior con mentalidad orgánica. Las mariquitas (término general para los pequeños insectos coleópteros de la familia Coccinellidae) son, sobre todo, conocidas por alimentarse de áfidos, por lo que muchos cultivadores confían ciegamente en ellas como un medio de control de la araña roja.

No todo el mundo considera que las mariquitas solas sean compatibles con la invasiva y devastadora araña roja, y si tu problema es grave, puede ser conveniente considerar la introducción del género ácaro depredador Phytoseiulus, disponible en la mayoría de los buenos puntos de suministro de productos ecológicos.

La orina de los animales ¡es un buen repelente!

Para las pequeñas plagas de animales como conejos y ratones, y otras aún más grandes como venados, utilizar la orina de las especies que habitualmente se alimentan de las especies de plagas es una excelente idea. Para los conejos, la orina de zorro rojo es ideal. Para los ratones, la orina de los armiños o del visón puede funcionar. En los EE.UU., las especies depredadoras son cazadas por una serie de depredadores totalmente diferentes, y la orina de puma, de gato montés y de oso puede ser muy valiosa para repeler toda una variedad de plagas, incluidos los ciervos.

En algunas partes del mundo que han erradicado las grandes especies de depredadores, como en el Reino Unido y los Países Bajos, se dice que usar pelo humano sin lavar o estiércol de león es una excelente alternativa. Antes de empezar a preguntarte cómo narices se supone que debes conseguir orina de armiño o estiércol de león, hay varias tiendas especializadas online que pueden proporcionarte lo que necesitas, ya sea de origen «real» o sintético.

Cercas y jaulas metálicas

Construir cercas y jaulas alrededor de las plantas es una manera evidente de repeler las plagas de mayor tamaño, aunque es probable que no sirva de mucho para evitar que los insectos lleguen al cultivo. Si se lleva a cabo un cultivo de guerrilla en espacios naturales, esta opción es aún menos posible, ya que las grandes estructuras, como las cercas, pueden ser una indicación visual para los transeúntes curiosos (¡o la policía!) de que algo está pasando.

Sin embargo, las jaulas metálicas pueden resultar prácticamente invisibles desde una distancia corta, sobre todo si el alambre está pintado de verde para ayudar a disimularlo. Siempre y cuando las cercas y jaulas estén bien construidas, deberían ser todo lo que se necesita para mantener alejados a los ciervos.

Los conejos pueden ser más difíciles de repeler de esta manera, y si representan un problema, hundir las cercas al menos 15cm (6″) en el suelo y ponerlas en forma de L (como se describe en esta guía) es la única solución. Incluso esto puede no ser 100% efectivo, porque los conejos son ¡criaturas tenaces a las que les encanta cavar!

Usa pesticidas naturales siempre que puedas

Si los métodos anteriores no proporcionan una protección total contra las plagas, el siguiente paso es echar un vistazo a los compuestos repelentes que se pueden pulverizar sobre las plantas para hacerlas venenosas, o desagradables, para las plagas.

Hay cientos de productos sintéticos disponibles en el mercado, pero muchos de ellos pueden ser muy perjudiciales para la salud del ecosistema local y para su planta de cannabis. Para evitar causar daños al medio ambiente, los agricultores orgánicos utilizan pesticidas de origen vegetal, como el aceite de neem, el aceite de cítricos, la pimienta de cayena, y el aceite de ajo.

Estos pesticidas naturales los llevan utilizado durante miles de años los agricultores de todo el mundo, y en épocas pasadas, fueron la principal defensa de los agricultores contra los insectos y animales. Puedes descubrir que una combinación de diferentes pesticidas orgánicos te proporciona la protección que necesitas. Aquí puede encontrarse una buena fuente de recetas para plagas específicas.

Crea un «círculo mágico» alrededor de las plantas de cannabis

Pimientos de cayena apilados en una planta
La pimienta de cayena contiene compuestos naturales que pueden actuar como repelente de plagas de insectos y de animales (© JKD Atlanta)

Si la idea de recubrir tus plantas preciadas con aerosoles nocivos te resulta impensable, puedes utilizar pesticidas orgánicos para proteger las plantas de una manera un poco diferente. En lugar de pulverizar la mezcla de plaguicidas directamente sobre la planta, intentar rociar en un amplio círculo alrededor de las plantas, dejando un espacio de, por lo menos, un metro (3,28’) entre las plantas y el anillo de pesticida.

Este «círculo mágico» debería hacer que los insectos que entran en contacto con él se mueran, o al menos ¡se batan en una rápida retirada! Por supuesto, se recomienda volver a pulverizar el círculo, más o menos, cada semana, para asegurar que la fuerza del círculo mágico no se ve afectada.

Este método tiene la ventaja añadida de que se puede usar durante todo el ciclo de cultivo, mientras que si pulverizas directamente sobre las plantas, tendrás que dejar de hacerlo para cuando están en plena floración, y si no lo haces, te arriesgas a que el producto final tenga un sabor raro e incluso resulte inservible.

  • Disclaimer:
    Las leyes y regulaciones relativas al cultivo de cannabis difieren de un país a otro. Por lo tanto, Sensi Seeds recomienda encarecidamente que se revisen las leyes y regulaciones locales. No se debe actuar en contra de la ley.

Comments

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Autor

  • Profile-image

    Sensi Seeds

    El equipo editorial de Sensi Seeds incluye botánicos, expertos médicos y legales, además de activistas de renombre como el Dr. Lester Grinspoon, Micha Knodt, Robert Connell Clarke, Maurice Veldman, Sebastian Marincolo, James Burton y Seshata.
    Más sobre este autor
Ir arriba