Si te interesan las novedades relacionadas con la marihuana, es posible que hayas visto por ahí el término HHC (hexahidrocannabinol). Es un cannabinoide que aún no se ha investigado a fondo y sabemos muy poco sobre sus posibles beneficios y riesgos. Sin embargo, tiene algunas similitudes con los compuestos más populares del cannabis, el THC y el CBD.
El hexahidrocannabinol (HHC) es un compuesto que ha despertado recientemente el interés de los medios de comunicación, pues se anuncia como una alternativa a la marihuana. El hexahidrocannabinol es un cannabinoide menor presente en las plantas de Cannabis sativa, especialmente en el polen y en las semillas. Sin embargo, la investigación científica sobre este compuesto es escasa, y aún no sabemos mucho sobre él.
Se conocen más de cien cannabinoides, muchos de los cuales no se han investigado en profundidad, incluyendo el hexahidrocannabinol (HHC). Mientras que los cannabinoides más difundidos, como el THC y el CBD, pueden constituir entre el 20% y el 30% del material vegetal, los cannabinoides menores sólo están presentes en cantidades inferiores al 1%. La concentración de hexahidrocannabinol en las plantas es tan baja que con frecuencia se pasa por alto.
¿El HHC es natural o sintético?
El hexahidrocannabinol se define como un fitocannabinoide que producen de forma natural las plantas de marihuana. Sin embargo, apenas está presente en ellas, y es poco probable que encuentres productos que contengan hexahidrocannabinol en su forma natural.
A los productores profesionales les resulta más fácil sintetizarlo a partir de otros cannabinoides. Así, este compuesto natural poco común puede reproducirse químicamente a partir de otros cannabinoides disponibles, mediante un proceso denominado hidrogenación, en el cual se añaden átomos de hidrógeno a moléculas insaturadas con la ayuda de un catalizador. El HHC puede crearse aplicando la hidrogenación al cannabinoide Delta-9-THC, el cual abunda en las plantas de marihuana.
Como el compuesto final procede de un producto natural, se denomina «semisintetizado» o «semisintético». Los anuncios de productos sintéticos que contienen HHC pueden calificarlo como «derivado del cáñamo» o «elaborado a partir de cáñamo natural».
Semejanzas químicas del HHC con respecto al THC
La primera vez que el mundo científico tuvo conocimiento del hexahidrocannabinol fue cuando Roger Adams lo sintetizó y registró una patente sobre él en la década de los 40. Durante mucho tiempo pasó desapercibido, nadie hablaba de él.
La estructura química del hexahidrocannabinol es C21H32O2. Es decir, está formado por 21 átomos de carbono (C), 32 átomos de hidrógeno (H) y dos átomos de oxígeno (O). Los átomos de hidrógeno están conectados a los átomos de carbono, y los átomos de oxígeno forman grupos funcionales que influyen en las propiedades y la reactividad del compuesto.
A nivel molecular, el HHC es muy similar al delta-9 tetrahidrocannabinol (THC), la principal molécula psicoactiva de las plantas de cannabis. Tienen casi la misma composición molecular. La principal diferencia estructural entre ambas es que el THC tiene un doble enlace de carbono en el anillo ciclohexilo, mientras que el HHC cuenta con un átomo de hidrógeno en ese lugar.
En cuanto al aspecto, el HHC también es muy parecido al THC. Es un material resinoso, de color amarillo brillante, con una consistencia sólida y viscosa a temperatura ambiente.
¿En qué se parecen los efectos del HHC a los del THC?
Como ocurre con muchos cannabinoides menores, se necesita más investigación científica para poder formular afirmaciones sólidas sobre el hexahidrocannabinol y sus posibles efectos terapéuticos sobre la mente y el cuerpo. Hasta ahora, casi todo lo que se conoce acerca de sus efectos procede de pruebas anecdóticas.
Algunos efectos potenciales del HHC incluyen:
- Una sensación de subidón similar a la que produce el THC.
- Euforia y percepción alterada.
- Alivio del dolor.
- Estimulación del apetito.
- Aumento del ritmo cardíaco.
Desde el punto de vista neuronal, sabemos que el HHC se une a los receptores neuronales CB1, de forma similar a como lo hace el THC. Esto, sumado a las semejanzas estructurales, sugiere que los efectos del HHC pueden ser muy parecidos a los de su primo más famoso, incluyendo los posibles beneficios para la salud. Esto está en parte respaldado por los testimonios de los consumidores.
Lo describen como una mezcla de los típicos efectos calmantes del CBD y el subidón que provocan las variedades sativas. Algunos lo encuentran muy potente, mientras que otros lo equiparan al moderado THC delta-8. Como ocurre con otros cannabinoides, los efectos pueden variar de una persona a otra y dependen en gran medida de la dosis, la pureza y la constitución mental y física del individuo. Aún no se ha investigado lo suficiente sobre los efectos del HHC como para excluir posibles riesgos para la salud.
Algunos hallazgos científicos sugieren que el HHC podría tener efectos anticancerígenos. Sin embargo, esto no significa que el consumo de HHC por sí solo sea un tratamiento válido contra el cáncer. Estos hallazgos sólo apuntan a una posible aplicación farmacéutica aún por desarrollar.
¿Por qué es tan popular el HHC?
Si te has encontrado con productos que contienen HHC, como vape pens o comestibles, quizá te hayas preguntado por qué este cannabinoide menos conocido parece gozar de tanta popularidad recientemente.
Uno de los motivos podría ser que los distintos cannabinoides ejercen efectos diferentes según la persona, aunque inicialmente parezcan muy similares. Alguien que no obtenga resultados óptimos con el CBD y el THC podría tener una experiencia más satisfactoria con el HHC u otro cannabinoide menor. Dado que el sistema endocannabinoide de cada individuo es diferente, es posible que unos cannabinoides funcionen mejor que otros.
Otra razón que explica la mayor disponibilidad de productos que contienen HHC tiene que ver con la legalidad. Mientras que el THC sigue siendo ilegal en la mayoría de los países, hay pocas leyes que restrinjan el desconocido HHC.
Subidones legales de HHC como consecuencia de la prohibición
En varios países, los vaporizadores, los comestibles, las «mezclas de hierbas» y muchos otros productos que contienen HHC, se pueden adquirir libremente en parafarmacias y en comercios online. Aunque el compuesto de la planta en sí no sea nocivo, algunos productos distribuidos por fabricantes sin licencia pueden plantear problemas. Los productores de los llamados «subidones legales» aprovechan los vacíos legales para vender brebajes potencialmente peligrosos elaborados en unas condiciones no reguladas.
La síntesis de un compuesto como el HHC es un reto y requiere el máximo cuidado, dedicación y diligencia científica. Muchos productos actuales no especifican los ingredientes y componentes utilizados. También existe el peligro de que queden residuos no deseados en el producto final tras una síntesis química no profesional.
Los subidones legales potencialmente peligrosos, en los que se mezclan y venden sin restricciones diversos cannabinoides artificiales y sustancias químicas desconocidas, son un resultado directo de la prohibición de la marihuana. Esta ilegalización puede dar lugar a un mercado sin restricciones en el que se vendan productos cannabinoides artificiales que no han sido probados. Por desgracia, también se restringe la investigación de estos componentes, algo muy necesario, lo que provoca confusión e incertidumbre sobre los posibles efectos, riesgos y beneficios de los cannabinoides menores.
Es necesario seguir investigando el HHC
El hexahidrocannabinol (HHC) es un cannabinoide menor que, según los estudios, se encuentra en las plantas de Cannabis sativa en concentraciones muy bajas. Las pruebas científicas que existen sobre él son muy escasas. El HHC se sintetiza a partir de otros cannabinoides, por lo que es un compuesto semisintético. Comparte una estructura molecular similar a la del THC, la principal molécula psicoactiva de las plantas de cannabis, y se une a los mismos receptores neuronales CB1.
Aunque los comentarios de los consumidores sugieren que el HHC puede tener efectos similares a los del THC, se necesita investigar más para comprender sus posibles efectos terapéuticos y riesgos para la salud. Como el HHC es legal en algunos países donde los cannabinoides vegetales están prohibidos, se ha hecho bastante popular en productos para vapear y comestibles, aunque la calidad y la seguridad de los mismos son dudosas.
- Disclaimer:Las leyes y regulaciones referentes al consumo del cannabis difieren de un país a otro. Por lo tanto, Sensi Seeds recomienda encarecidamente que revise las leyes y regulaciones locales. No se debe actuar en contra de la ley.
Hola, esporádicamente lo consumo porque mi trabajo trata de conducir vehículos varios, con manejo de mercancías varias…su efecto es igual al THC y se nota casi al instante, lo consumo fumando mezclado con un poco de picadura. Se necesita muy poca cantidad por su frescura y facilidad para aumentar volumen, tan solo crear una barrita con los dedos-(tamaño de un arroz con un poquito de picadura) queda un buen cigarrillo. Reconozco que sus efectos son asombrosamente como los de THC&CBD algo más tranqui… ;D<3 Saludos!