La Pure Power Plant es un híbrido 60% sativa que no manifiesta los rasgos típicos. En nuestro informe de cultivo mostró un patrón de crecimiento claramente índica, con una altura baja, floreciendo en un tiempo récord. Su rendimiento no fue espectacular, pero nos impresionó su velocidad, versatilidad y facilidad de cultivo, siendo ideal para principiantes.
Duración total del cultivo: 69 días
Etapa de floración: 48 días
Altura final: 75 cm
Rendimiento final: 76 gramos
Contenido en THC: 16,5%
Para el cultivo de nuestras semillas de marihuana Pure Power Plant Feminizadas utilizamos una lámpara HPS Philips GreenPower de 1000 W con un horario 18/6 durante la etapa vegetativa. La planta creció en una maceta de plástico de 8 litros rellena de BAC Lava Mix y cubierta con una fina capa de lana de roca. En la sala de cultivo mantuvimos una temperatura estable de 23°C durante el día, con temperaturas nocturnas que bajaban a 21°C y una humedad relativa del 65% durante la etapa vegetativa.
Germinación y plántula
Para comenzar a cultivar nuestra planta, lo primero que tuvimos que hacer fue germinar las semillas. Este paso es posiblemente la parte más fácil de todo el proceso de cultivo y no requiere ningún equipo especial. Sólo necesitas papel de cocina, un plato y una bolsa de plástico.
Basta con doblar unas toallitas de papel y ponerlas en un plato. A continuación, añade una pequeña cantidad de agua (no te excedas, las servilletas deben estar húmedas, pero no empapadas). Ahora, esparce las semillas por encima dejando unos centímetros de separación entre ellas si vas a germinar más de una. Cúbrelas con otra toallita de papel húmeda, mételo todo en una bolsa de plástico abierta y déjalas reposar en un lugar cálido durante un día más o menos.
Transcurrido poco más de un día, la semilla se abrió, revelando la raíz pivotante. La plantamos en un cubo de lana de roca (con la raíz hacia abajo) y la colocamos bajo una lámpara de 600 W durante unos días mientras desarrollaba las raíces. En este punto, las plántulas son increíblemente delicadas y un exceso de luz, calor o agua podría dañarlas permanentemente. Al cabo de tres días, le administramos a la plántula su primera alimentación, la cual consistió en 100 ml de agua con pH equilibrado (pH 6,2; CE 0,8) mezclada con una pequeña cantidad de hormona de enraizamiento.
Al final de la primera semana, nuestra plántula de Pure Power Plant Feminizada medía 4 cm de altura y se veía sana. Como era de esperar, aún no había brotado ninguna hoja verdadera, pero los cotiledones lucían un saludable color verde oscuro. Llegados a este punto, había llegado el momento de trasplantarla a su nuevo hogar: una maceta de plástico de 8 litros situada debajo de una lámpara de 1000 W de potencia. Había llegado el momento de alimentarla adecuadamente, por lo que empezamos a regarla con 200 ml de agua (pH 6,0; CE 1,4) mezclada con nutrientes líquidos Bio Grow.
Etapa vegetativa
En la segunda semana, la plántula de Pure Power Plant creció con bastante lentitud y sólo alcanzó una altura de 7 cm. Era de esperar, ya que esta variedad se caracteriza por su baja estatura. Aunque el crecimiento vertical fue mínimo, la planta se mostró increíblemente productiva y desarrolló un conjunto completo de hojas verdaderas cortas y anchas, además de brotar su segundo conjunto.
En la tercera semana se produjo un crecimiento bastante significativo: la planta ganó 10 cm, alcanzando una altura de 17 cm. Además, apareció un nuevo conjunto de hojas con un espaciado internodal estrecho y se formaron las primeras ramas laterales. A tenor de este desarrollo, duplicamos el volumen de agua, administrando 400 ml al día.
Asimismo, en esta etapa, colgamos en las ramas inferiores de la planta unas bolsitas de Neoseiulus californicus y Amblyseius swirskii. Estos saquitos contienen cientos de bichitos diminutos que viven simbióticamente con las plantas de cannabis y no les provocan ningún daño. Por el contrario, son muy beneficiosos porque se alimentan de parásitos como la araña roja y los trips, que pueden destruir la cosecha si no se controlan. Estas bolsitas se sustituyen cada cuatro semanas para mantener la población estable.
Etapa de floración
En la cuarta semana iniciamos la floración de nuestra Pure Power Plant. Para ello, cambiamos el horario de iluminación a 12 horas de encendido y 12 horas de apagado, además de añadir diariamente nutrientes líquidos Bio Flower mezclados con 800 ml de agua de pH equilibrado (pH 6,0; CE 1,8).
En esta semana se produjo el mayor estirón de la planta, que casi triplicó su tamaño hasta alcanzar una estatura de 44 cm. Este crecimiento vertical vino acompañado de un fuerte desarrollo de las ramas laterales, lo cual daría lugar a la clásica forma de árbol de Navidad típica de muchas índicas. En vista de este crecimiento vertiginoso, redujimos la humedad del espacio al 60% para evitar la formación de moho.
La planta creció hasta los 59 cm en la quinta semana y empezó a mostrar los primeros signos de floración al aparecer pequeños pelos blancos en los nudos interiores y en la parte superior de las ramas. Para ayudar a mantener el ritmo de desarrollo, volvimos a aumentar el riego, aportando un total de 1.000 ml diarios.
En la sexta semana se produjo el último gran estirón de la planta, la cual creció 13 cm, situándose así en los 72 cm de altura. A partir de ese momento, todo su esfuerzo se centraría en el desarrollo de las flores. Los pequeños pelos blancos se estaban convirtiendo poco a poco en racimos de preflores que la cubrían por completo. Como la floración completa estaba a la vuelta de la esquina, aumentamos el volumen de agua a 1.500 ml diarios.
Llegó la séptima semana y nuestra planta ya se alzaba 74 cm del suelo, de los cuales 2 cm correspondían a la cola principal, que no paraba de crecer. Todos los puntos de floración estaban bien arraigados y las flores de los extremos de las ramas convergían en cogollos individuales. El desarrollo era frenético y cada día que pasaba las flores crecían considerablemente, haciéndose más grandes y densas. Llegados a este punto, bajamos la humedad al 60%.
En la octava semana no se produjo ningún crecimiento vertical, pero las flores estaban en su punto álgido. Las cubrían brillantes tricomas y eran increíblemente pegajosas al tacto. La planta desprendía un olor skunk y terroso que ponía de manifiesto su linaje índica. El olor era perceptible, pero no exagerado. En cualquier caso, si valoras la discreción, merece la pena invertir en algún sistema para el control de olores.
La novena semana fue muy similar: no se produjo crecimiento vertical debido al desarrollo masivo de las flores. Los pistilos iban adquiriendo lentamente un color naranja intenso, lo que significaba que la cosecha se acercaba poco a poco. El peso creciente de los cogollos estaba hundiendo ligeramente las ramas laterales, pero no fue necesario reforzarlas.
En la décima semana, la mayoría de los pistilos presentaban ya un color anaranjado y el crecimiento de las flores se frenó considerablemente. La cosecha estaba a la vuelta de la esquina y sólo quedaba esperar a que la naturaleza siguiera su curso.
Por fin, en la undécima semana, cosechamos nuestra Pure Power Plant Feminizada.
Cosecha
Cosechar nuestra Pure Power Plant fue increíblemente sencillo. En primer lugar, la cortamos por la base, le quitamos las hojas de abanico y la colgamos boca abajo en un recinto climatizado (15,5°C; 50% de humedad) hasta que las ramas estuvieron lo bastante quebradizas como para romperse al doblarlas (normalmente, al cabo de 10-20 días).
Una vez que la planta estuvo seca, retiramos los cogollos para recortar las hojas restantes. Esta tarea resultó especialmente sencilla en el caso de esta variedad, ya que no es especialmente frondosa, aunque las hojas son bastante pequeñas y puede resultar un poco difícil arrancarlas todas. Una vez recortados los cogollos, los colocamos en tarros de cristal para curarlos.
Dejamos abiertos los tarros durante las primeras 24 horas para que se evaporara la mayor parte de la humedad restante. Una vez cerrados, los íbamos «eructando» varias veces al día durante una hora. En las semanas posteriores fuimos reduciendo la frecuencia gradualmente hasta que sólo los abríamos una vez al día. Tras unas 6 semanas de curado, nuestra Pure Power Plant estaba lista para su uso.
En total, pudimos cosechar 76 gramos de flores secas con un contenido en THC del 16,5%. Aunque no son unas cifras récord, son realmente impresionantes para una planta que creció con tanta facilidad y rapidez manteniendo un tamaño reducido.
Perfil de terpenos
Cuando abrimos uno de los tarros de Pure Power Plant Feminizada, nos invadió un aroma almizclado y cítrico que escondía notas a vainilla. El sabor coincide exactamente con el olor, aunque con un sutil toque especiado en el fondo.
Tras probar nuestra Pure Power Plant, sentimos sus efectos inmediatamente. A pesar de su forma y tamaño, esta planta sigue siendo un híbrido de predominio sativa, es decir, que produce un subidón estimulante y energizante. Esta variedad favorece la fluidez comunicativa, por lo que rápidamente nos encontramos inmersos en una conversación y luchando por recuperar el aliento entre carcajadas.
Si tienes previsto salir con amigos, esta variedad es ideal. Pero ten cuidado, ya que su naturaleza índica puede salir a relucir si te excedes: demasiada cantidad podría dormirte.
El resultado
Puede que la Purple Power Plant no sea la variedad más productiva o potente que existe, pero si quieres algo rápido, fácil y divertido de cultivar, es una opción realmente fantástica. Gracias a su rapidísima etapa de floración, es perfecta para experimentar con nuevas técnicas de cultivo. Su estatura compacta la hace ideal para un SOG, mientras que su rápida etapa de floración permite la aplicación de métodos de cultivo más lentos, como el fimming o el mainlining.