La Papi Chulo OG Feminizada se creó combinando tres variedades OG de primera categoría: Face Off OG, San Fernando Valley OG y OG Kush. Recorre con nosotros cada fase del ciclo de cultivo y sus múltiples perfiles de terpenos y sabores.
Etapa de floración: 64 días
Periodo total, de la semilla a la cosecha: 99 días
Rendimiento final: 97 gramos
Contenido en THC: 27,26%
Estábamos deseando poner a germinar nuestra Papi Chulo OG Feminizada, pero éramos conscientes de que antes resultaba esencial preparar bien la zona de cultivo. Así pues, para la iluminación colocamos una lámpara HPS Green Power Phillips de 1.000 W a tres metros por encima del borde de las macetas. Como sustrato elegimos BAC Lava Soil Mix y, a lo largo de las distintas fases de crecimiento, le añadimos Bio Grow o Bio Bloom. Los niveles de CE de la solución nutritiva variaban, pero siempre se ajustaba el pH a 6,0 antes de aplicarla.
Para estimular el crecimiento, sometimos a nuestra Papi Chulo OG Feminizada a un ciclo lumínico de 18 horas de luz y 6 horas de oscuridad durante toda la etapa vegetativa. A continuación, el programa se modificó a 12 horas de luz y 12 horas de oscuridad para iniciar la etapa de floración. Las temperaturas diurnas alcanzaron los 23°C, descendiendo a 21°C durante la noche. A medida que avanzaba el ciclo, los niveles de humedad se redujeron del 65% al 60%. Los ventiladores oscilantes distribuían el aire por el dosel, y los extractores se encargaban de renovar el aire estancado y oloroso mediante un filtro de carbón.
Germinación y plántula
Para hacer que germinara nuestra Papi Chulo OG Feminizada, colocamos la semilla entre dos toallitas de papel húmedas encerradas dentro de dos platos de cerámica. Al cabo de 36 horas, una pequeña raíz pivotante emergió de las toallitas de papel, por lo que retiramos la semilla con cuidado antes de colocarla con la raíz pivotante hacia abajo en su nuevo macetero de un litro.
Recuerda colocar la raíz pivotante de la semilla hacia abajo, ya que así se asentará la zona radicular y la envoltura de la cáscara se eliminará de forma natural a medida que la raíz la empuje hacia arriba y la saque de la tierra. Durante los días restantes de la primera semana añadimos 100 ml de agua enriquecida con un estimulante de raíces alrededor de la base del tallo.
Etapa vegetativa
En la segunda semana, nuestra Papi Chulo OG Feminizada había crecido hasta alcanzar los 13 cm, y sabíamos que el sistema radicular se estaba desarrollando. Para estimular aún más el crecimiento, aplicamos nutrientes Bio Grow con una CE de 1,4. Mantuvimos el volumen de 100 ml y aplicamos la solución alrededor de la base del tallo. Al décimo día descubrimos que por los orificios de drenaje de la maceta asomaban raíces de alimentación, por lo que trasplantamos la plántula a un tiesto de 5 litros para estimular el crecimiento de las raíces.
Gracias a la introducción de Bio Grow y al espacio adicional para la zona radicular, el crecimiento se aceleró y, en la tercera semana, nos emocionó ver cómo nuestra Papi Chulo OG Feminizada había duplicado su altura. La planta había desarrollado hojas de siete dedos de un vibrante color verde lima con bordes afilados y dentados. Las ramas auxiliares inferiores se estaban extendiendo, y el espaciado internodal era medio. Al final de la semana, la Papi Chulo OG Feminizada alcanzó los 27 cm, y aumentamos el volumen de la solución a 400 ml.
A lo largo de la cuarta semana aumentamos los niveles de nutrientes y elevamos la CE final de la solución a 1,8, duplicando su volumen hasta 800 ml y aplicándola uniformemente sobre la superficie. Como no queríamos recurrir a productos químicos, soltamos insectos depredadores y dañinos para las plagas. Se colocaron trampas de Neoseiulus californicus y Amblyseius swirskii en posición vertical sobre la superficie de la tierra para controlar la aparición de parásitos como los mosquitos de los hongos, los trips y los pulgones. El crecimiento fue vigoroso durante toda la semana.
Etapa de floración
En la quinta semana decidimos iniciar la etapa de floración por lo que reprogramamos el horario lumínico a 12 horas de luz y 12 horas de oscuridad para facilitar el cambio hormonal de la planta. Se suspendieron los nutrientes Bio Grow, sustituyéndolos por nutrientes Bio Bloom. Mantuvimos la CE de la solución en 1,8, pero aumentamos el volumen a 1.000 ml, mientras que los niveles de humedad se redujeron al 60%. Aparecieron unas enormes hojas de nueve dedos y, para soportar el peso adicional, fijamos con bridas unos tutores al tallo principal.
En la sexta semana evaluamos el rendimiento de nuestra planta: todo iba según lo previsto. La cantidad de vegetación aumentó exponencialmente, impidiendo que las ramas inferiores recibieran luz directa y un movimiento de aire adecuado. Como la circulación del aire dentro del dosel es esencial, pues ayuda a evitar microclimas de aire cálido y húmedo, defoliamos las hojas de abanico más grandes y las ramas laterales. Al final de la semana, la planta había crecido 20 cm, por lo que aumentamos la cantidad de solución a 1500 ml.
Con el tiempo, las sales de los nutrientes sintéticos pueden acumularse en la tierra y provocar problemas de pH, desequilibrios de nutrientes y mala salud de las raíces. Como parte de nuestros procedimientos operativos estándar, en la séptima semana lavamos el medio vertiendo un gran volumen de agua pura por la superficie de la tierra hasta que se generó un 10-15% de escorrentía. Eliminamos el agua residual y, tras el lavado, continuamos con nuestro programa habitual de alimentación.
En la octava semana ya se podían observar estigmas blancos en todas las puntas de las ramas y la formación de cogollos empezaba a cobrar protagonismo. La planta medía 114 cm y se había convertido en un ejemplar bien formado, con una cola apical dominante. Habían pasado cuatro semanas desde la última vez que liberamos los insectos depredadores Neoseiulus californicus y Amblyseius swirskii, por lo que colocamos otra bolsita de cada uno de ellos. Por suerte, el dosel y el envés de las hojas se inspeccionaban regularmente y no encontramos señales de plagas perjudiciales.
Resultaba evidente que nuestra Papi Chulo OG Feminizada canalizaba toda su energía hacia la formación de cogollos, por lo que en la novena semana sólo registramos 2 cm de crecimiento vertical. Las flores de la planta se expandían y empezaban a conectarse, formando colas al final de cada rama. Una capa de tricomas comenzó a cubrir la superficie de las hojas de azúcar que rodeaban cada uno de los cogollos. A medida que los cogollos se hinchaban fuimos reduciendo la humedad ambiental hasta situarla en el 58%.
En la décima semana eliminamos las ramas inferiores que no recibían luz suficiente con objeto de redistribuir la energía de crecimiento a otras ramas. A medida que los cogollos de nuestra Papi Chulo OG Feminizada se hinchaban fuimos reduciendo los niveles de humedad hasta situarlos en el 52% durante las últimas semanas. Continuamos aplicando los nutrientes Bio Bloom a una CE de 1,8; el volumen de la solución fue de 1.500 ml por riego, y el pH se mantuvo invariable en 6,0.
En la undécima semana ya no registramos crecimiento vertical: toda la energía se destinaba a la producción de flores. A diario, al entrar en el jardín, nos recibían olores florales que abarcaban notas dulces y acres. Nuestro filtro de carbón funcionaba bien y, fuera del cultivo, el olor era indetectable, pero dentro era inconfundible.
Tras cuatro semanas de alimentación intensiva, enjuagamos el medio con agua pura antes de reanudar el programa nutricional habitual. El color de las hojas conservaba un saludable verde intenso, lo que indicaba que disponían de nutrientes suficientes como para crecer de forma óptima. Por otro lado, ya habían pasado cuatro semanas desde la última aplicación de insectos beneficiosos, pero como no vimos ningún problema y se acercaba el momento de la cosecha, optamos por no liberar más insectos depredadores.
En la duodécima semana, al observar detenidamente las cabezas de los tricomas, comprobamos que la cosecha estaba próxima. Comenzamos a ver cabezas de tricomas de color ámbar en las hojas, pero no en la flor. Esta inspección es el mejor indicador para calcular una fecha aproximada de cosecha. Sin embargo, cuando aparecen en gran cantidad en las hojas de azúcar, puede considerarse un signo de que se acerca la cosecha, por lo que conviene empezar con los preparativos.
Empezamos la decimotercera semana revisando de nuevo las cabezas de los tricomas. Para evaluar la madurez de la planta, los cultivadores comprueban que exista un 10% de cabezas de tricomas transparentes, un 80% lechosas y un 10% ámbar. Al examinarlas, pudimos ver un número creciente de cabezas de tricomas de color ámbar. Esa proporción aumentaría con toda seguridad en los diez días siguientes, y pensamos que nuestra Papi Chulo OG Feminizada estaba dentro de la ventana de cosecha, por lo que procedimos a realizar un lavado final.
Se eliminaron todos los nutrientes, y nuestra Papi Chulo OG Feminizada solo bebió agua pura hasta el momento de la cosecha. También realizamos una poda previa del follaje, eliminando las grandes hojas en abanico que retienen la humedad superflua, algo que puede aumentar el tiempo de secado si hay muchas plantas presentes.
Nuestra Papi Chulo OG Feminizada alcanzó los 120 cm en la decimocuarta semana. La mayoría de los estigmas se habían vuelto marrones y habían retrocedido hasta convertirse en brácteas hinchadas. La inspección de las cabezas de los tricomas reveló la proporción deseada de colores (transparente, lechoso y ámbar), y los efectos del lavado eran evidentes en la decoloración y el color amarillo de las hojas. A medida que la planta maduraba, unos aromas seductores añadían capas de complejidad al ya tentador perfil. ¡Había llegado el momento de la cosecha!
Cosecha
Nuestro proceso de secado del cannabis es el que se utiliza habitualmente en el sector. Primero retiramos las hojas grandes de la Papi Chulo OG Feminizada. Todo lo que no tenga tricomas no servirá de nada posteriormente. En climas con muy poca humedad, conservar esta biomasa extra puede contribuir a retrasar el proceso de secado, pero en la mayoría de los casos se elimina. El área de secado es oscura y está climatizada a 15,5°C con una humedad del 60%.
Cortamos nuestra Papi Chulo OG Feminizada por la base del tallo y la llevamos a la zona de secado para colgarla boca abajo. Varios ventiladores desplazaban el aire alrededor de las plantas, pero evitamos en todo momento que apuntaran directamente sobre ellas. Al cabo de una semana, comprobamos el grado de desecación de los cogollos. La capa exterior seguía húmeda, así que continuamos el proceso durante al menos otra semana.
Cuando llegó el día 21 del secado colgante, comprobamos que la parte externa de las flores había alcanzado el nivel de humedad que queríamos. El exterior de los cogollos estaba seco y ligeramente crujiente, pero el centro conservaba una humedad considerable. Una vez envasados para su curado, la humedad interna sale a la superficie y rehidrata la capa exterior. Antes de envasar nuestra Papi Chulo OG Feminizada, recortamos el exceso de hojas de azúcar y las dejamos a un lado para elaborar posteriormente productos comestibles.
Rellenamos los tarros de cristal y dejamos la tapa quitada durante las primeras 24 horas. Después los cerramos herméticamente y los guardamos en un armario oscuro y fresco. Hacíamos eructar los tarros cada pocas horas (es un procedimiento que consiste en abrir el tarro y dejar que salga la humedad liberada). Esto facilita que los cogollos de Papi Chulo OG Feminizada equilibren sus niveles de humedad del centro a la superficie. Durante las dos primeras semanas dejamos las tapas abiertas durante una hora cada vez que se hacía eructar a los tarros.
Cada vez que eructábamos los botes notábamos como se intensificaba el aroma de nuestra Papi Chulo OG Feminizada. El perfil de terpenos era complejo y tenía muchas influencias. El proceso de curado duró seis semanas y, durante las últimas cuatro, eructamos los tarros sólo una vez al día. Las flores habían alcanzado el grado adecuado de desecación y mantenían una textura uniforme.
Tras completar el proceso de curado nos quedaron 97 gramos de flor de marihuana de primera calidad. Las muestras se enviaron a un laboratorio externo para que analizara los cannabinoides, y los resultados arrojaron un extraordinario contenido en THC del 27,26%.
Perfil de terpenos
La Papi Chulo OG Feminizada posee un perfil de terpenos en el que predominan el limoneno, el a-pineno y el mirceno. En nuestro caso, la planta empezó a desprender olores detectables en el último mes de floración y, a medida que se acercaba la cosecha, estos se intensificaron. Mientras la flor colgaba secándose, el aroma siguió añadiendo capas y, cuando los cogollos terminaron de curarse, una compleja mezcla de aromas envolvía los sentidos.
Al inhalar el aire que rodeaba a nuestra Papi Chulo OG Feminizada nos asaltaba un dulce aroma a limón acompañado de una refrescante fragancia a pino. Seguidamente, los aromas florales aportaban un trasfondo donde los olores mohosos y terrosos, y los penetrantes olores skunk, se mezclaban con el lado más dulce del perfil. El perfil del sabor era un reflejo de los terpenos: notas a limón y tierra cubrían el paladar, acompañadas de una pizca de pino y matices Kush.
El linaje de la Papi Chulo OG Feminizada está compuesto por un 70% de índica y un 30% de sativa, algo que se refleja en las múltiples capas que ofrecen sus efectos, estimulantes en un primer momento, con una ráfaga inicial de sensaciones eufóricas que potencian la mente, algo que representa claramente a las sativas. Sin embargo, esta sensación da paso a un colocón corporal pesado que proporciona una relajación completa. Los efectos de la Papi Chulo OG Feminizada fueron duraderos e intensos durante la noche.
El resultado
Disfrutamos mucho del ciclo de cultivo y quedamos impresionados por los resultados, ya que obtuvimos 97 gramos de marihuana de primera calidad con un perfil de terpenos y una estética excepcionalmente atractivos. No se utilizaron técnicas de entrenamiento, y la planta creció con su estructura natural. Sin embargo, fue necesario utilizar algún soporte suplementario para hacer frente al peso de los cogollos. Los efectos resultaron ser mixtos, con cualidades tanto índicas como sativas. Los cogollos secos eran de color verde eléctrico y estaban cubiertos de una capa de tricomas nevados.
Nuestro programa de alimentación era sencillo, y la Papi Chulo OG Feminizada se comportó como una variedad de bajo mantenimiento que podría ser una excelente incorporación al jardín de cualquier cultivador principiante. Sin embargo, para quienes deseen llegar al límite, el impresionante 27,26% de THC de nuestra Papi Chulo OG Feminizada está sin duda en lo más alto de la escala, lo que la convierte en una elección popular entre los consumidores experimentados.
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- Disclaimer:Las leyes y regulaciones relativas al cultivo de cannabis difieren de un país a otro. Por lo tanto, Sensi Seeds recomienda encarecidamente que se revisen las leyes y regulaciones locales. No se debe actuar en contra de la ley.