Blackberry Cake Feminizada

Blackberry Cake Feminizada

La Blackberry Cake Feminizada es una planta de alto rendimiento apta para cultivadores de todos los niveles. Nos sorprendió su contenido en cannabinoides y un exótico perfil de terpenos que ofrece un dulce aroma terroso y cítrico. Esta variedad, de efectos eufóricos pero relajantes, es ideal para disfrutar con los amigos y la familia.

Etapa de floración: 72 días

Periodo total, de la semilla a la cosecha: 99 días

Rendimiento final: 167 gramos 

Contenido en THC: 29,5%

Nuestro último informe de cultivo está dedicado a la Blackberry Cake Feminizada. ¡Nos complace compartir contigo todos los detalles de una de nuestras plantas favoritas! Esta variedad se creó dentro de nuestro programa Research, desarrollado en exclusiva por Sensi Seeds. Las genéticas se seleccionaron magistralmente a partir de un cruce de Wedding Cake, Durban y Black Domina.

Cultivamos nuestra Blackberry Cake Feminizada en un espacio de cultivo interior, empleando tierra BAC Lava Mix y alimentándola con nutrientes Bio Grow y Bio Bloom. En el periodo de plántula y en la etapa vegetativa aplicamos un ciclo de luz que alternaba entre 18 horas de iluminación y 6 horas de oscuridad, el cual modificamos durante la etapa de floración a 12/12 horas. Al utilizar semillas feminizadas no tuvimos que sexarlas durante la floración temprana.

Del techo, a tres metros por encima del suelo, suspendimos una lámpara HPS Phillips Green Power de 1.000 W y un reflector. Colocamos varios ventiladores oscilantes a distintas alturas para facilitar la circulación del aire de la sala y bajo el dosel. Para renovar el ambiente viciado del espacio de cultivo añadimos un extractor integrado, el cual contaba con un filtro de carbono que eliminaba los olores que desprendían las plantas en la etapa de floración.

Controlamos rigurosamente los parámetros medioambientales para garantizar la máxima eficiencia de crecimiento y el mejor rendimiento posible. En el cuarto de cultivo mantuvimos una temperatura constante de 23°C durante el día y de 21°C por la noche. La humedad de la sala se ajustó a un 65% al principio del cultivo, pero se redujo gradualmente durante la floración.

Germinación y plántula

Colocamos nuestra semilla de Blackberry Cake Feminizada en un cubo Jiffy previamente humedecido para que germinara. Cuando el cotiledón emergió del agujero, trasladamos la cubeta a un tiesto con 1 litro de tierra, el cual colocamos a 80 cm bajo una lámpara Green Power Phillips HPS de 600 W. 

No hizo falta regar hasta el tercer día, momento en que vertimos 100 ml de agua con un pH de 6,0 y un estimulador de raíces. Para asegurar la máxima absorción, echamos el agua alrededor de la base del tallo. Las raíces eran jóvenes y aún no habían alcanzado la base del recipiente. Al final de la primera semana, nuestra Blackberry Cake Feminizada ya medía 3 cm.

Etapa vegetativa

La segunda semana fue muy intensa para nuestra pequeña Blackberry Cake Feminizada. Las raíces empezaron a sobresalir por la base del tiesto de 1 litro, así que la trasplantamos a un macetero de 5 litros. Ahora que se habían asentado algunas raíces, incorporamos la nutrición Bio Grow con una CE de 1,4. 

Como parte de nuestra rutina proactiva de gestión integrada de plagas, liberamos dos tipos de insectos beneficiosos para prevenir brotes de trips, mosquitos de los hongos y arañas rojas de dos manchas. El primer tipo (Neoseiulus californicus) controla los ácaros dañinos, concretamente la araña roja de dos manchas, mientras que el segundo (Amblyseius swirskii) es un depredador general que se utiliza para acabar con el trips y la mosca blanca.

En la tercera semana, nuestra Blackberry Cake Feminizada ya medía 20 cm y presentaba una zona radicular sana. Aumentamos el aporte de agua, vertiendo 200 ml alrededor del tallo. La planta evolucionaba favorablemente y ya había desarrollado cinco nudos, de los cuales brotaban hojas grandes, anchas y de color verde esmeralda que se extendían hacia los bordes exteriores del macetero. El tallo aumentó de grosor y todos los indicadores apuntaban a un crecimiento vigoroso.

Etapa de floración

En la cuarta semana, nuestra Blackberry Cake Feminizada ya alcanzaba una altura de 32 cm. Sabíamos que esta variedad experimenta un crecimiento espectacular cuando entra en floración, así que decidimos hacer la transición en ese momento y cambiar el programa de iluminación a 12 horas de luz / 12 horas de oscuridad. También ajustamos los niveles de humedad, reduciéndolos al 60%.

Suspendimos la administración de nutrientes Bio Grow, sustituyéndolos por la fórmula Bio Bloom. Añadimos el producto alimenticio al agua y ajustamos la CE final a 1,7 antes de aplicarlo a la zona radicular. El volumen de riego aumentó a 400 ml, que repartimos uniformemente por la superficie de la tierra del tiesto.

Como habíamos previsto, hacia el final de la quinta semana, nuestra Blackberry Cake Feminizada comenzó a crecer de forma espectacular. Ahora consumía agua muy deprisa, por lo que aumentamos la dosis a 800 ml, lo que alargó un poco la frecuencia de riego. Conviene no esperar a que las hojas se caigan para regar la planta: el objetivo es adelantarse a ese momento. Aumentamos la aportación de nutrientes, y la solución final registró un valor de CE de 1,8 antes de la aplicación. 

Crecieron con rapidez muchas ramas auxiliares, que ahora sobresalían del tallo principal. El espaciado internodal seguía siendo estrecho, pero cada una de las ramas se extendía lo suficiente como para captar la luz sin obstrucciones. Algunas hojas adquirieron un color más claro como consecuencia del rápido crecimiento. A medida que maduraban, el color varió a un saludable verde esmeralda.

Al examinar nuestra Blackberry Cake Feminizada en la sexta semana observamos que medía 87 cm de altura. ¡Era una barbaridad! Aumentó 30 cm con respecto a la semana anterior. Era la hora de la verdad. Nuestra planta estaba dando sus primeros pasos. Aumentamos el volumen de la solución a 1.500 ml por riego para favorecer ese crecimiento. Ajustamos el pH de la solución a 6,0 y la CE final fue de 1,8.

Para evitar que se formaran microclimas bajo el dosel de nuestra Blackberry Cake Feminizada, eliminamos parte del exceso de vegetación. Retiramos las ramas inferiores y muchas de las hojas más grandes. De este modo abrimos la estructura de la planta y permitimos una mayor circulación de aire. Eliminar las ramas inferiores también ayuda a desviar el potencial de crecimiento hacia las ramas superiores, más expuestas a la luz.

Ya habían pasado cuatro semanas desde la última vez que diseminamos saquitos de Neoseiulus californicus y Amblyseius swirskii. No detectamos ningún ataque de plagas en nuestra Blackberry Cake Feminizada, pero eso no significaba que no existiera el riesgo. Para mitigar la amenaza que suponen los trips, los mosquitos de los hongos, las arañas rojas de dos manchas y otras plagas, colocamos otro saquito de cada uno de los insectos beneficiosos en la planta.

En la séptima semana, nuestra Blackberry Cake Feminizada continuó desarrollándose satisfactoriamente bajo las condiciones que le proporcionamos. Registramos otros 25 cm de crecimiento y vimos cómo los estigmas emergentes se transformaban en pequeños globos que más tarde darían lugar a los cogollos. Anticipándonos a su desarrollo, colocamos tutores de jardinero para ayudar a sostener su peso.

Dado que hemos estado administrando una gran concentración de suplementos, comenzamos la semana lavando el medio. Dejando correr agua pura por el sustrato elimina las sales acumuladas y el exceso de nutrientes. Tras el lavado, reanudamos la alimentación habitual durante el resto de la semana. 

En la octava semana, nuestra Blackberry Cake Feminizada ya medía 147 cm, casi cinco veces más que cuando la pusimos en floración. Es necesario señalar que mantener la estructura firme ayudó mucho a lograr este espectacular crecimiento, con docenas de ramas y múltiples yemas de cogollos en cada una de ellas. Es una variedad con un potencial enorme para producir un buen rendimiento, y conseguimos hacerla florecer justo en el momento adecuado.

La tendencia cambió al llegar la novena semana, pues se detuvo casi por completo el crecimiento vertical. Nuestra Blackberry Cake Feminizada ahora se concentraba en el crecimiento y acumulación de flores. Algunas ramas inferiores no recibían luz suficiente, así que las eliminamos para enviar más energía a las ramas superiores y conseguir un crecimiento óptimo. La planta presentaba ya una enorme cola terminal que sobresalía por encima de las ramas inferiores. Sabíamos que a esta Blackberry Cake Feminizada aún le quedaban varias semanas de crecimiento y, para nuestro deleite, no mostraba ningún tallo al descubierto: los cogollos ya habían rellenado los espacios internodales. 

En la décima semana, al examinar la planta como parte de nuestra rutina regular de control integrado de plagas, nos dimos cuenta de que el follaje seguía siendo demasiado espeso, por lo que eliminamos algunas ramas auxiliares y hojas de abanico.

Los cogollos eran cada vez más tupidos y eliminar el exceso de follaje ayudó a mejorar la circulación de aire en el dosel, reduciendo así la probabilidad de botritis. También redujimos la humedad de la habitación al 56%. Y como habían transcurrido cuatro semanas desde que liberamos por última vez a los Neoseiulus californicus y los Amblyseius swirskii, decidimos ser minuciosos y colgar otro saquito de cada uno de ellos en las ramas inferiores.

Iniciamos la undécima semana lavando la tierra con agua pura y eliminando la escorrentía. Tras el lavado, continuamos con la alimentación habitual a 1,8 CE. Las ramas laterales empezaban a caerse debido al peso de los cogollos en desarrollo, por lo que colocamos más tutores para sostener las ramas. 

La duodécima semana nos trajo, por primera vez, un olor definido y reconocible al entrar en la zona de cultivo. Nuestra Blackberry Cake Feminizada desprendía un penetrante aroma floral que llenaba el aire. Sin embargo, gracias al extractor con filtro de carbono, este olor no se percibía fuera del cuarto de cultivo. 

El crecimiento vertical se había detenido y los densos cogollos se apilaban unos sobre otros. Esto confirió a las flores una estructura abierta muy apreciada por los artistas de la extracción. La mayoría de los estigmas seguían siendo blancos, pero detectamos cierta hinchazón en las brácteas, indicador de que la cosecha estaba próxima.

Comenzamos la decimotercera semana inspeccionando con una lupa de joyero las cabezas de los tricomas para averiguar cuándo debíamos proceder a la cosecha. Tras examinar los cogollos de la parte superior, media e inferior de la planta, determinamos que probablemente alcanzaría su punto máximo de maduración en los 14 días siguientes. Observamos que predominaban las cabezas lechosas, con aproximadamente un 12-13% de color claro y un 7-8% de color ámbar. En las dos semanas siguientes, la proporción de cabezas claras y ámbar se igualaría, y ese sería el momento de cosechar.

El objetivo es dejar que la planta consuma todos los nutrientes almacenados antes de la cosecha, una medida que puede suavizar el sabor durante el consumo. Eliminamos los nutrientes Bloom en las últimas semanas y solo añadimos agua pura en el riego, lo que ayudaría a eliminar el exceso de nutrientes de la tierra y a que la planta dependiera de sus nutrientes almacenados.

La decimocuarta semana fue la última para nuestra Blackberry Cake Feminizada. A finales de la misma quedaron patentes en las grandes hojas en abanico nuestros esfuerzos por purgar la tierra, ya que antes presentaban un color verde esmeralda, pero ahora mostraban un tinte amarillento que indicaba una falta de nutrientes. Los estigmas se habían replegado sobre todo en las brácteas hinchadas y cubiertas de tricomas.

Al inspeccionar la planta, observamos una proporción equilibrada en las cabezas de los tricomas: 80% lechosas, 10% transparentes y 10% de color ámbar. Durante esta última semana, el aroma floral se hizo más intenso y, tras 99 días, decidimos cosechar nuestra Blackberry Cake Feminizada.

Cosecha

Controlar el ambiente de la zona de secado es uno de los factores más importantes a tener en cuenta una vez finalizada la cosecha. Durante los 14 días de secado, la temperatura se mantuvo en 15,5°C y la humedad en el 60%. Se retiraron todas las hojas grandes de abanico para evitar un exceso de humedad, y la planta se colgó boca abajo en una oscuridad absoluta. Se emplearon ventiladores oscilantes para hacer circular el aire entre las ramas, evitando así que se acumulase humedad, y se comprobaron varias veces al día las condiciones de la sala de secado. 

Si la flor contiene mucha humedad antes de envasarla podría aumentar la probabilidad de botritis, mientras que si está demasiado seca resulta difícil rehidratarla. Tras una primera inspección minuciosa, nos pareció que aún faltaban unos días para que los cogollos de la Blackberry Cake Feminizada estuvieran en el nivel deseado. Al llegar el día 18, los niveles de humedad eran los deseados. ¡Llegó el momento de recortar!

Nos pusimos los guantes y retiramos las ramas, dejando un tallo lo suficientemente largo como para poder recortar cómodamente las flores sin tocarlas. Colocamos suavemente, sin apretar, los cogollos recortados en un tarro de cristal, y los dejamos sin tapa durante las primeras 36 horas del proceso de curado, lo que ayudó a eliminar el exceso de humedad. Recogimos el recorte sobrante y lo usamos para elaborar hachís.

Aunque el centro de los cogollos conservaba la humedad, la capa exterior estaba ligeramente crujiente antes de cerrar los recipientes. Durante las dos primeras semanas, abrimos los tarros varias veces al día, ventilándolos durante una hora. Cada vez que abríamos uno el ambiente se llenaba de un aroma floral cada vez más dulce y penetrante. Durante las cuatro semanas siguientes seguimos abriendo los tarros una vez al día, dejándolos así una hora, pues buscábamos un nivel de humedad óptimo, entre el 55 y el 65%. 

Enviamos una muestra a un laboratorio independiente para que analizara el contenido de cannabinoides y nos quedamos asombrados cuando recibimos el resultado: ¡el nivel de THC alcanzó el 29,5%! Sin duda, nuestra Blackberry Cake Feminizada demostró ser potente y de alto rendimiento. ¡Una opción excelente en cualquier jardín!

Perfil de terpenos

La Blackberry Cake Feminizada exhibió una diversidad de perfiles aromáticos a lo largo de cada etapa del ciclo de cultivo. Su olor era tenue hasta las tres últimas semanas de floración, momento en que desarrolló un bouquet floral. No es raro que el perfil de terpenos madure a lo largo de las fases de secado y curado. Al colgar la planta, un tono terroso empezó a entrelazarse con el penetrante aroma floral.

Al destapar los tarros tras seis semanas de curación pudimos apreciar diversos aromas, y cada uno de ellos poseía una intensidad que aportaba riqueza al perfil general. Se podían detectar fuertes notas terrosas combinadas con sutiles toques a pino, además de ligeras pinceladas florales de fondo. Una sorprendente aportación al perfil de terpenos fue el refrescante aroma cítrico que se desarrolló durante el curado.

Nuestra Blackberry Cake Feminizada ofrecía un sabor delicioso, digno de su nombre. La profundidad del perfil nos sorprendió, con un sabor cremoso que satisface a los paladares más caprichosos. Por último, un toque especiado añade cierto equilibrio entre dulzor y acidez.

Los efectos de nuestra Blackberry Cake Feminizada pueden describirse como relajantes, con una suave sensación de euforia, con influencia tanto índica como sativa. Algunas personas afirman experimentar un aumento de la creatividad, pero en general, los efectos se perciben como estimulantes y reconfortantes.

El resultado

La Blackberry Cake Feminizada ha resultado ser una planta poco exigente y fácil de cultivar, con una duración de 99 días desde la semilla hasta la cosecha. ¡Nos encantó que las semillas fueran feminizadas, pues así nos ahorramos el tiempo del sexado! Ofreció un rendimiento excelente, y produjo unos cogollos estupendos desde la base hasta la copa. Las brácteas se amontonaron unas sobre otras creando torres cubiertas de tricomas que coronaban cada una de las densas flores.

Nuestra Blackberry Cake Feminizada alcanzó una altura de 147 cm y, una vez curadas las flores, la cosecha registró 167 gramos de producto consumible. Los efectos obtenidos fueron considerables, y un laboratorio independiente confirmó que nuestra Blackberry Cake Feminizada presentaba un nivel de THC del 29,5%. ¡Sin duda, una variedad divertida y fácil de cultivar, que produce grandes rendimientos y efectos potentes! 

¿Te gustaría que hiciéramos un diario de cultivo de alguna variedad en concreto? Déjanos tus sugerencias en los comentarios. ¡Y mientras tanto, diviértete en el jardín!

  • Disclaimer:
    Las leyes y regulaciones relativas al cultivo de cannabis difieren de un país a otro. Por lo tanto, Sensi Seeds recomienda encarecidamente que se revisen las leyes y regulaciones locales. No se debe actuar en contra de la ley.

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    Sensi Seeds

    El equipo editorial de Sensi Seeds incluye botánicos, expertos médicos y legales, además de activistas de renombre como el Dr. Lester Grinspoon, Micha Knodt, Robert Connell Clarke, Maurice Veldman, Sebastian Marincolo, James Burton y Seshata.
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